El jamón es el embutido de la gastronomía española más popular. El jamón serrano sigue un proceso de curación similar al del jamón ibérico pero de menor tiempo. El proceso normalmente dura siete meses aunque puede alcanzar un máximo de 24 meses. El jamón serrano de cruce Duroc ofrece un punto óptimo de equilibrio entre la calidad de la materia prima y una curación tradicional que permite alcanzar una textura, aroma y color perfectos para su degustación.