La cebolla es una hortaliza con un escaso aporte calórico porque su contenido en agua es de alrededor del 90%. Gracias a su apreciable aporte de fibra y su contenido mineral y vitamínico es un excelente alimento regulador del organismo. Cabe destacar además su acción antiséptica y que, debido a su elevado contenido en fibra, aporta sensación de saciedad tras su consumo. La cebolla es una hortaliza tan versátil que puede consumirse tanto cruda como cocinada (asada, hervida, rehogada, salteada o frita). Es muy habitual su uso como acompañamiento de platos de todo tipo a base de carne, pescado, verdura, legumbres y guisos, sin olvidarnos de sopas, cremas y purés.